LA LUNA EN NUESTRAS SÁBANAS
La luna está envuelta en una llama roja
bostezo y me erizo al percibir tu aliento
tus senos lucen frescos como helechos en la madrugada.
Paso mi lengua por tu espalda
chispeánte desierto
e inhalo tu vapor salobre.
Lamo tu labio herido
en la furia de los mentones
y recuerdo algunos vinos.
La luna arde en llamas
violento tus pieles
y eyaculo en tu luna
un gran chorro de fuego.
SALOMÓN BORRASCA
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SEXO EN PARÍS
Tu llegaste a mi vida una noche de bohemia
una noche en que mi cuerpo estaba ansioso de placer,
con tu risa me atrajiste y ante un cruce de tus piernas,
tuve ganas de cuerpo, de tu carne tuve sed.
Arrojados en el suelo dominabas mi cintura,
tu eras hiena lujuriosa que saltaba sobre mí
y al sentir regarse ardiendo un vino que no era de uva,
me sentí como el amante más ardiente de París.
SALOMÓN BORRASCA